lunes, 14 de diciembre de 2009

Cuando el niño perdió el año escolar

La pérdida de un año escolar para un joven de primaria, siempre es un motivo doble de preocupación. Por un lado el sufrimiento del niño que se siente que ha quedado como excluido del grupo y obligado a cambiar de promoción, si es que quiere seguir en el colegio.

Por otro, los padres habrán vivido una angustia intensa, muchas veces mezclada con cólera, rabia y no entendimiento del porqué su hijo, de casi 10 años, ha podido descuidar tanto sus estudios al punto de fracasar en el año escolar.

Importa saber que las causas por las que un hijo es jalado en el año escolar varían mucho según la edad que tenga. Si es mayor de 15 años, los motivos serán de tipo social y crisis de crecimiento, puesto que a esa edad ya tienen que pensar en cambiar su lógica de estudio para prepararse a lo que será la universidad.

Si es menor de 11 años, como el caso del que estamos hablando, habrá que pensar que, por lo general, está vinculado a problemas con los padres, directos o indirectos, tales como excesiva exigencia, castigos exagerados, ausencia de figura paterna o la inminencia de una separación de los padres.

Estas causas deprimen mucho al niño y suelen provocar las bajas notas. La superación dependerá de que hagan participar a un psicoterapeuta que aclare las angustias y tristezas del menor.


Fuente: Diario Trome (Fernando Maestre)